Iglesias que también invaden la Reserva
“La fe mueve montañas” es una expresión popular frecuentemente utilizada en Nicaragua. Sin embargo, si tuviéramos que adecuarla a la situación que padece la reserva tendríamos que decir que la fe no “mueve” sino que empuja a la naturaleza invadiendo sus límites y destruyéndola. Esta afirmación se basa en el rol que algunas iglesias y sus representantes locales están desempeñando en la toma de tierras.
Durante los últimos años hemos visto construir templos religiosos, principalmente evangélicos, en la zona núcleo de la reserva. Los pastores o delegados de las diferentes denominaciones llegan a los asentamientos con el supuesto afán de predicar y crear sus grupos de feligreses.
Estas personas, que pueden provenir de la zona de amortiguamiento o de otras regiones del país, toman tierras en la reserva y posteriormente promueven la llegada de más colonos que habitan en áreas cercanas (fuera de la reserva) ofreciendo ubicarlos a cambio de integrarse a sus congregaciones.
Una vez su membresía ha crecido inician la construcción de la infraestructura para lo cual solicitan el aporte de sus integrantes y el respaldo, en varios casos, de la municipalidad de El Castillo.
Durante el 2018 el Batallón Cívico Indio-Maíz y la organización ambientalista Fundación del Río documentaron y denunciaron la existencia de 17 capillas o templos en la zona núcleo de la Reserva.
A pesar de dicho esfuerzo el número de este tipo de infraestructura continúa en aumento y próximamente se darán a conocer los nuevos casos documentados.